viernes, julio 11, 2008

Un buen tipo - Una frase para la historia


Ingrid Betancourt dijo de él que ella no estaría viva sin su cuidado, y así, lo pueden decir otros 10 secuestrados que duraron más tiempo en manos de las FARC.

William Pérez dijo que "Como auxiliar de enfermería, siempre necesitaba la orden de un médico para poder dar una pastilla, pero allá [en la selva] fui médico y hasta psiquiatra". Él ha sido un héroe, un hombre con una misión, alguien inspirador para un pueblo sufrido como Colombia.

No había escrito nada sobre Ingrid Betancourt a pesar de la profunda alegría y ternura que me produjo la liberación de los secuestrados porque quería saborear y disfrutar, catar lentamente, como se juega con un buen vino en el paladar, la buena nueva que un presentador de noticias, muy mal ponderado por mi parte, dio a modo de exclusiva cuando recibía un premio de la academia de televisión española.

Tengo que decir que me emosioné cuando escuche a Juan Manuel Santos anunciar la liberación de los secuestrados y decir el nombre de Ingrid, también que, aunque no comparta sus ideales y para nada su forma de actuar, el presidente Uribe y el ejercito colombiano merecen mis respetos por esa obra de arte llamada operativo.

Algunos dicen que ha sido un montaje, qué han pagado 20 millones de euros, pero que importa, ¡qué más da!, que nos dejen con la romántica escena de Santos diciendo el nombre de Ingrid y los periodista aplaudiendo, que nos dejen con la emosionante figura de los liberados bajando por la escalera del avión, qué nos dejen con la sonrisa de medio mundo hablándonos de los liberados y de Ingrid Betancourt.

Una frase para la historia:"... entonces ellos gritaron: Somos el ejercito nacional de Colombia, son libres!. En ese momento el helicóptero casi se cae!..."

Gracias a Dios que no se cayó, seis, diez o doce años en la selva para que se cayera el helicóptero de la libertad? no, por supuesto que no.

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Comentarios:
Esa emoción, o por lo menos el estrépito causado, debió ser como cuando Riboneto metió el segundo gol contra el nacional en aquella final del 2004. Aquello de que esto casi se cae me suena. Eso es lo más cercano que puedo imaginar que sucedió. ¡Se va a caer, se va a caer...!
 
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